Borrar
George W. Bush firma con India un histórico acuerdo para la cooperación nuclear
George W. Bush firma con India un histórico acuerdo para la cooperación nuclear
MUNDO

George W. Bush firma con India un histórico acuerdo para la cooperación nuclear

Para Washington, «lo bueno para la no proliferación es que nunca hemos tenido una visión transparente del programa atómico indio, y ahora lo tendremos» La mayoría de los 15 reactores quedará sujeta a las salvaguardas de la AIEA

AGENCIAS

Viernes, 3 de marzo 2006, 01:00

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

El acuerdo de cooperación nuclear alcanzado ayer entre India y Estados Unidos representa un éxito para la no proliferación a juicio de Washington, que encara una fuerte resistencia en el Congreso de su país para verlo aprobado.

El acuerdo, anunciado por el presidente George W. Bush y el primer ministro Manmohan Singh en Nueva Delhi, establece la división de los programas nucleares civiles y militares de India, un país que no ha suscrito el Tratado de No Proliferación nuclear (TNP), y somete a los primeros a la supervisión internacional. A cambio,Washington se compromete a conseguir el visto bueno de su Congreso y el grupo de países productores de material nuclear para que tenga acceso a tecnología atómica extranjera, ahora algo prohibido para los países no firmantes del TNP.

El convenio comenzará a aplicarse este año y se completará en 2014, según el 'número tres' del Departamento de Estado norteamericano, Nicholas Burns, que viaja con Bush en su gira por Afganistán, India y Pakistán. Según Burns, el acuerdo, que ha sido calificado de «histórico» por el líder estadounidense, representa un paso muy positivo: «Lo bueno para la no proliferación es que nunca hemos tenido un impacto, una visión transparente del programa nuclear indio, y ahora lo tendremos», señaló el subsecretario de Estado adjunto para Asuntos Políticos.

Nuevas obligaciones

Además, por primera vez en 30 años, según agregó, «India ha aceptado nuevas obligaciones para la no proliferación», entre ellas una nueva ley de control de exportaciones y el compromiso a mantener una moratoria unilateral de pruebas nucleares.

Según Burns, el acuerdo prevé que, de los 15 reactores en funcionamiento y siete en construcción de la India, «una mayoría sustancial» quedará designada como civil a perpetuidad y sujeta permanentemente a las salvaguardas de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA). A esas salvaguardas estarán sujetos también todos los reactores civiles que se construyan en el futuro, incluidos los de alimentación rápida -productores de plutonio-, una de las cosas que estuvo en negociación hasta el último momento. Corresponde a la India decidir si el reactor de alimentación rápida con el que ya cuenta se incluye en el programa civil o en el militar, explicó Nicholas Burns.

Las negociaciones para conseguir el pacto, que comenzaron hace ocho meses, han sido muy arduas. Las dos delegaciones mantuvieron contactos incluso a bordo del 'Air Force One', que trasladó a Bush a Nueva Delhi el miércoles, y no consiguieron cerrar el acuerdo hasta las 10.30 horas locales (5.30 hora española), cuando Bush y el primer ministro indio, Manmohan Singh, habían iniciado ya la reunión en la que esperaban anunciar el pacto. Según el mandatario americano, las negociaciones «no han sido fáciles» para ninguno de los dos países, pero se trata de un acuerdo «necesario» para ambos.

Pero el acuerdo de cooperación nuclear encara ahora una difícil cuesta arriba en el Congreso de EE. UU., donde el Gobierno ha comenzado ya su ofensiva para tratar de convencer a los legisladores renuentes. La secretaria de Estado, Condoleezza Rice, telefoneó ayer a destacados senadores para ponerles al tanto del acuerdo.

Varios legisladores se oponen a lo que consideran un premio a la India por no firmar el TNP y se declaran preocupados porque la iniciativa pueda facilitar el traspaso de tecnología a terceros países u organizaciones terroristas. Las exigencias a Irán dificultan la comprensión e incluso 'generosidad' hacia este país. Muchos lo consideran un serio precedente que lastrará la política exterior norteamericana. E incluso obligará dulcificar algunos gestos que en las circunstancia actuales pueden interpretarse como de pura debilidad.

Un acuerdo único

El Gobierno estadounidense aduce que éste es un acuerdo «único, pensado sólo para India». Burns dijo que «no creemos que pueda replicarse o se vaya a reeditar con otros países fuera del TNP», que o bien han incumplido sus obligaciones con la AIEA o han transferido tecnología nuclear a otros. India, recordó, no ha dado pie a casos de proliferación pero sí padece una demanda de energía que no puede satisfacer en las circunstancias actuales.

El acuerdo «no es perfecto en el sentido de que no se aplica al cien por cien del programa nuclear indio, porque es una potencia nuclear y mantendrá parte de su industria nuclear al servicio de su programa militar. Pero la mayoría del programa estará ahora sometido a las inspecciones internacionales, y creemos que esa es una ganancia tremenda», declaró el alto funcionario estadounidense.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios