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TEXTO: PALOMA S. HERVA Y NACHO SAMPER
Jueves, 9 de marzo 2006, 01:00
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LA delegación en Melilla de la Unesco no ceja en su empeño de formar parte de la Comisión de Patrimonio Histórico y Artístico, la encargada de elaborar el expediente con el que la ciudad pueda ser considerada Patrimonio de la Humanidad. Con el único fin de «orientar y ayudar», el responsable de la Unesco en Melilla, Juan Antonio Vera, explicó ayer, al término de su encuentro con el delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, que «estamos a la espera» de obtener una respuesta por parte de la Consejería de Cultura para optimizar la candidatura pretendida desde la Fundación Melilla Ciudad Monumental.
En este punto, Vera aclaró que Unesco «evidencia» que hay que analizar «a fondo» ese expediente que se vaya a presentar en París «porque estamos hablando de un reconocimiento social e internacional». Puesto que no existe lugar a dudas del magnífico patrimonio artístico y modernista del que goza la ciudad, Juan Antonio Vera está convencido de que a esa riqueza monumental se le debe añadir otra joya: la interculturalidad, «un aspecto que todavía no se ha analizado». Con conocimiento de causa, desde Unesco Melilla se recuerda que lograr la distinción de Patrimonio de la Humanidad incluye todo el territorio, «y no a un monumento o a una zona determinada».
Ayuda a los menores
Abordado este punto, crucial para el futuro de Melilla, el delegado de Unesco informó del resultado de su reunión con Fernández Chacón. Un encuentro al que también asistió su homólogo de Nador, Faris El-Mesaudi, y en el que abordaron aspectos relacionados con los menores, la inmigración, el ecologismo, la educación y el ámbito sanitario. De todas estas cuestiones, El-Mesaudi destacó que tanto el Club Unesco de Nador como el de Melilla persiguen gestionar los centros de menores que se construyan en el país vecino, «colaborando con los dos gobiernos». Aún sin tener ningún compromiso concreto, Juan Antonio Vera recordó el acuerdo de colaboración al que se llegó en su día por el que se participaba en la integración de los menores en sus respectivos ámbitos familiares o bien en centros especiales de Marruecos, «algo que parece que es de interés para el Gobierno de Zapatero».
En cuanto al aspecto sanitario, lo trasladado al delegado del Gobierno se centró en la necesidad de ampliar el hospital de Nador, con aportaciones tanto de entidades y fundaciones privadas como de la Agencia Española de Cooperación Internacional, «ampliando y mejorando las prestaciones sanitarias». El último tema en cuestión, el referido al ecologismo, hacía clara referencia al proyecto de construcción de un gran balneario, con urbanización incluida, en la zona de la Mar Chica. Sobre este asunto, Faris El-Mesaudi aclaró que «las obras comenzarán dentro de poco tiempo», si bien lo que urge antes es limpiar la zona, tarea que interesa a varias oenegés españolas y que incluiría un inventario sobre los índices de polución, tanto aérea como marítima, que sufre la zona marroquí más próxima a Melilla.
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