Expertos internacionales
reunidos en Annecy (Francia)
consideraron ayer que los problemas
sufridos por dos niñas de Valencia no
están relacionados, como se ha mantenido
desde un principio, con la aplicación de
la vacuna contra el virus del papiloma
humano (VPH). La razón de sus dolencias
podría estar en que ambas sufrieron un
síndrome de conversión, lo que provocó
su ingreso en el Hospital Clínico de
Valencia.
Esta fue una de las conclusiones de unas
jornadas sobre el riesgo y beneficio de
las vacunas, organizadas por la
Fundación Merieux en Annency, a la que
han acudido expertos internacionales y
en las que, en todas las sesiones, se ha
hablado del caso de las niñas de
Valencia y la seguridad de la VPH. «Las
vacunas son los medicamentos más seguros
del mundo», aseguró Javier Díez Domingo,
jefe del área de investigación de
vacunas del Centro Superior de
Investigación y Salud Pública.
El pasado 16 de abril se reunió el grupo
de expertos que analiza el caso de las
dos niñas valencianas y en los próximos
días hará pública sus conclusiones, que
coinciden con las de estos expertos.