Los niños
concebidos in vitro muestran una tasa más alta
de cáncer infantil
EFE
Los niños probeta tienen hasta un 42% más de
probabilidades de padecer cáncer infantil que
los nacidos de partos naturales, según un
estudio de la Universidad de Lung en Suecia.
Pese a los contundentes resultados, los
científicos no han establecido una vinculación
directa entre el método de concepción y la
enfermedad, según se desprende del análisis de
la investigación publicado ayer en la revista 'Pediatrics'.
En trabajos anteriores no se había detectado un
incremento significativo del riesgo de cáncer
entre los niños nacidos después de la
fertilización in vitro.
Ante las evidentes alarmas que el tema pueda
suscitar entre las parejas que optan por esta
vía para tener a sus hijos, los autores destacan
que la incidencia de cánceres detectados puede
estar relacionada con las características
genéticas de los padres y no con el método en
sí. Además, un porcentaje considerable de bebés
probeta nace prematuramente y tiene problemas
respiratorios al nacer, aspectos vinculados en
otros estudios con mayores riesgos de padecer
algún tipo de cáncer.
Con cautela
En EE UU, donde la las concepciones in vitro son
responsables del 1% de los nacimientos anuales,
los expertos se han tomado con cautela la
investigación. El doctor Tommaso Falcone, jefe
de ginecología de Cleveland Clinic, mostró su
escepticismo de que se pudieran hallar
resultados similares en un país con mayor
diversidad racial, como EE UU.
La investigación analizó más de 2,4 millones de
nacimientos entre 1982 y 2005, incluyendo casi
27.000 niños in vitro, además de datos sobre
cáncer en niños en un periodo de 19 años. En
total, 53 bebés probeta desarrollaron cáncer. La
leucemia y el tumor cerebral fueron los más
comunes. |